
5. Lady Fantasy
11 septiembre, 2015
3. Chelsea Monday
16 noviembre, 2015En esa época tenía algunos caprichos un tanto absurdos y de niño inconsciente. Mi cuarto era un autentico museo del rock progresivo con mis vinilos, mis libros de música, mi batería sorda (que era todo menos sorda) y con todas las paredes forradas de posters de Marillion, Pendragon, IQ, VDGG, etc. Incluso tenía un poster de “Fish” a tamaño natural en el techo. Odiaba las portadas de los vinilos impolutas y plastificadas, siempre parecían nuevas, eran horrorosas. Les pegaba raquetazos en mi cuarto para que parecieran más auténticas.
Mis padres estaban desesperados conmigo.
Padres: Mikli, ¿por qué haces tanto ruido en tu cuarto? Cuando no es la música, son otros ruiditos raros o esa batería sorda que hace un montón de ruido. Además, siempre hay mucho humo en tu habitación. Por favor hijo, para ya, esto es una tortura y tú ya no eres un niño.
Cuando cumplí los 30 mis padres me invitaron muy amablemente a que abandonara las dependencias familiares. Soy el mayor de mis hermanos y el último en irme de casa. Ya era hora de independizarme y ser un hombre de verdad (o al menos intentarlo). Aunque a decir verdad, mi salida de casa poco cambió mi esencia.
1 Comment
He asistido a ese proceso y puedo asegurar que es tal y como se dice, pero las palabras no hacen justicia.
Habría que añadir oleadas de diversión y toneladas de pasión.